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lunes, 7 de mayo de 2012

Contacto con el nuevo Fiat 500 L





En el Salón de Ginebra nos quedamos con las ganas de sentarnos dentro del nuevo 500L. Cuando llegamos al evento organizado por Fiat, nos encontramos los coches cerrados, sin posibilidad alguna de tocarlo, sentarnos dentro o valorarlo como es debido. 


La marca italiana respondió a nuestras demandas, y tras escuchar las quejas nos convocó esta semana en el Centro Style de Turín para que conociéramos en primera persona el nuevo MPV de la marca, tanto en cuanto a su proceso de diseño como los detalles de su interior.

En el Centro Style nos recibió el jefe de diseño de Fiat y Abarth, Roberto Giolito, que nos condujo a través del proceso de diseño del coche, paso a paso, acompañado, entre otros, del responsable de diseño interior de la marca, el español Virgilio Fernández.

Durante la presentación, Roberto nos comentó el concepto básico del coche, y lo que se buscaba. De acuerdo con la gente de Fiat, la idea era hacer un coche "de dentro hacia afuera", es decir, diseñado para vivirlo dentro del habitáculo que es donde pasas la mayor parte del tiempo, más que viéndolo desde la calle.

Con el 500L se quería evolucionar el concepto exitoso del 500, para dar cabida a nuevos tipos de cliente, que buscaban un coche con identidad propia, que transmitiera al mismo tiempo "honestidad y una cara simpática", pero que también fuera funcional y de mayor tamaño. Porque a fin de cuentas, muchos de los clientes europeos del 500 convencional habían pasado a tener necesidades de un coche de mayor tamaño, necesidades que se busca complementar con este coche.



Porque, aunque Roberto y otras personas importantes de la marca, tanto en Italia como en España, me negaron que estuviéramos ante el sustituto directo del Multipla, el Idea y parte del Croma, la realidad es que el 500L ha de intentar dar continuidad en la línea de producto de la Fiat en un segmento que habían dejado descuidado. El hecho es que el Freemont, que poco tiene de diseño italiano, se ha encargado de acaparar gran parte de las ventas que tenía el Croma y conquistar nuevos tipos de cliente, con una especie de crossover entre SUV, familiar y monovolumen.

El 500L busca algo similar, pero a su propia manera. Intenta ofrecer a los clientes el espacio de un monovolumen, la practicidad y la "sensación de seguridad" (por la altura del asiento) de un SUV, pero sin "la provocación y la intimidación que en la carretera generan este tipo de vehículos".

Roberto nos confesó que Fiat trabajó a destajo en un 500 familiar, el famoso proyecto 500 Giardiniera, que llegó a fases bastante avanzadas de desarrollo (mulas de pruebas incluidas). El proyecto se descartó por tener una base potencial de clientes muy limitada (más o menos la misma del Clubman), e iba a resultar complicado amortizarlo.

Entonces tocó trabajar en una propuesta de 500 "familiar". De acuerdo con las palabras del equipo de diseño de la marca, la idea era contar con un coche que gustara a todo tipo de personas, que fuera muy versátil en cuanto a su configuración y posibles usos, y resultara una buena alternativa para los clientes que dejaban su coche de segmento C.


Aunque se emplearon elementos de diseño del 500, como el frontal, con un innegable aire de familia, también se optó por cruzar más elementos estéticos, como el pilar C tomado del Panda, o el salpicadero que mezcla ideas del 500 y del citado Panda. A todo esto se le agrega el concepto de "techo flotante", permitiendo una visión panorámica del exterior, creando una sensación abierta completamente al mundo que te rodea. De esto te hablaremos más adelante, en nuestras impresiones personales del proyecto.

A mi, que no me enseñaron a tener la boca cerrada, no se me ocurrió otra cosa que transmitirle al jefe de diseño nuestras dudas "razonables" sobre los parecidos en la vista de tres cuartos trasera con el Countryman y el Paceman.
Roberto defendió muy bien su postura: "el Panda tenía el pilar C de esta forma antes de que MINI lo empleara en el Countryman", en cuanto a los grupos ópticos traseros "no teníamos constancia de la forma de los del Paceman, y a fin de cuentas, el MINI sigue siendo un prototipo, nada más". El señor Giolito me invitó a comparar el Fiat con el Countryman en vivo "porque no se parecen en nada" afirmó, "es una cuestión de proporciones y tamaño". He de decir que tiene razón. En vivo el 500L se ve claramente más estrecho, bajo y visualmente menos pesado, algo más orgánico y tal vez hasta dinámico que el coche de MINI, más rudo y "macho".

Pero antes de meternos en un análisis pormenorizado, creo que hay dos temas claves que comentar. El primero es cómo nació el proyecto, tras descartar el Giardinera. Los primeros bocetos y propuestas que nos mostraron en el Centro Style me llamaron mucho la atención. Había una propuesta claramente retro de Roberto y de otro diseñador que se inspiraba en el 600 Multipla, con un frontal tremendamente vertical y una línea que personalmente me encantó.



Puede que yo no me lo comprara, pero estaba claro, como puedes ver en la imagen, que esta propuesta tenía mucho más "diseño" metido en su escultórica forma.

Los problemas para sacarla adelante eran de todo tipo. La plataforma que tenía que soportar el coche, que no es otra que "la nueva plataforma del segmento B del Grupo Fiat, que dará vida a los nuevos Punto, y a otras versiones del 500L, con capacidad de tren trasero independiente y tracción total", no valía para intentar un frontal tan corto, donde el motor iría "poco menos que encastrado".


Además había problemas con los reflejos del salpicadero, del capó, la accesibilidad mecánica...

Pero cuando todavía estaban pensando en cómo hacer el coche, llegó la compra de Chrysler. En las reuniones posteriores a la adquisición del tercer fabricante de Estados Unidos, el Grupo Chrysler comentó que estaba interesado en importar el 500L, siempre que entrara dentro de las normas NAFTA y los gustos norteamericanos en cuanto al diseño del coche.

Automáticamente esto descartó la increíble forma del neoMultipla, para dar luz verde a la segunda propuesta que más fuerte había brillado hasta entonces, la que ahora es el 500L.


Viendo los bocetos, viéndolo en vivo, y contemplando sus detalles con la calma de poder hacerlo en un salón privado, te diré que me gusta algo más que antes, y que es uno de esos coches que son claramente mejores en vivo que en foto. No me enamora, de hecho, para qué engañarnos, no me gusta. Tampoco me disgusta, y tal vez ahí esté la clave. No es un diseño a lo Multipla años 90 (te encanta o lo odias), sino que es un producto de estos que cuanto más lo ves más simpatía te despierta.


Lo más curioso, cerrando el apartado de apreciaciones estéticas, es que no tiene un rival claro. Montado sobre una plataforma del segmento B, el coche es compacto por fuera, pero no tiene la forma de un C3 Picasso o similares. No es "tan monovolumen". El coche que más se le parece es el Note, probablemente. Pero más allá de las apreciaciones estéticas está la impresión del interior, que es el punto fuerte de este modelo. Lo primero que hice fue sentarme en las plazas traseras. Son regulables y modulares, se pueden echar hacia adelante o hacia atrás, y hay dos posiciones para la inclinación del respaldo. Con mi modesto 1,73, y el asiento delantero ajustado para una persona de 1,73, el espacio para las rodillas (no sé si lo apreciarás en la foto) es muy generoso. De hecho, no recuerdo ningún segmento B con tanto sitio, tal vez el Note de Nissan.


El techo, que puede ser completamente transparente (opción obligada) y si traviesa entre los pilares B, da una sensación de luminosidad y espacio que jamás esperarías encontrar en un coche de este tamaño y presumible precio (no debería costar mucho más que un Punto). La visión hacia todos los lados es muy generosa, y tienes la idea de estar en un coche superior.

En las plazas delanteras te encuentras con un asiento elevado, aunque no tan alto como un SUV, y nuevamente una gran sensación de visibilidad en todos los ángulos gracias a la configuración del parabrisas panorámico, los pilares A bastante verticales, y la altura de la línea de cintura, que no resulta exagerada. Pero lo cierto es que casi se disfruta más del coche en las plazas de atrás, y eso es todo un cumplido.

Los asientos hacen uso de un material tipo neopreno con contraste de color y motivos insertados en la variante básica, llegando a contar con cuero en las versiones superiores. Las puertas tienen detalles de diseño, como los tiradores, y tienen los reposabrazos bien recubiertos de texturas agradables.

El sistema multimedia es un gran paso adelante para el Grupo Fiat, y lo veremos en casi todos sus modelos a partir de ahora (restyling del 500, Punto...).




El maletero resulta grande, y modular gracias a la posibilidad de mover los asientos traseros. Obviamente desconozco las comparaciones con sus rivales, porque a simple vista resulta complicado hacerse a la idea de ello, pero da la sensación de ser un maletero más que capaz para una familia de cuatro miembros.

Gracias a la modularidad del habitáculo puedes además cargar objetos largos dentro del coche, bicis...

Y si se te hace a poco, la versión de siete plazas, que saldrá en 2013, y de la que te dejamos fotos de las maquetas de diseño, ofrecerá todavía más espacio y alternativas únicas. Vimos de hecho un boceto de lo que parecía ser una variante con techo tipo Westfalia, pensado para los usuarios tipo surfero californiano. No tenemos ni idea de si llegará a la producción, pero que tenía buena pinta.



Y hablando de variantes, te diré que habrá, como ya adelantamos, una variante "todoterrenizada", un poco al estilo del Panda 4x4, que podría llamarse cross500L o algo así, y que tendrá una altura libre al suelo superior, unas defensas diferentes, y tracción integral opcional. Este modelo será más rival de los Countryman, y habrá que conocer el precio para situarlo en el mercado. Sustituirá al Sedici el año próximo, y compartirá plataforma con el Jeep del segmento B.

La otra variante que cabría esperarse sería un Abarth 500L, en palabras de la gente de Fiat "un SUV dinámico, prestacional y deportivo". No está decidido si saldrá, o por lo menos no nos lo confirmaron, pero lo cierto es que las sensaciones y sonrisas nos dan la idea de que sí que veremos un coche con el escorpión basado en este modelo.

¿Qué más contarte? Te resumiré en pocas palabras que me llevé una sensación muy positiva. Fui con la idea de que era un coche feo, que a mi, personalmente no me gustaba, pero tras pasar más rato con él, y sobre todo, tras sentarme en las plazas traseras, cambié mi perspectiva, y ahora lo veo como un producto más redondo, que tiene buenas perspectivas para triunfar a ambos lados del Atlántico, sobre todo si el precio acompaña.

Una buena manera de tener un coche para todo, y que será, nos prometieron, "frugal con el consumo, económico de comprar y mantener, y con mucho estilo propio".



Sigo pensando que habría sido "más guay" fabricar el neoMultipla de los bocetos, pero claro, a veces lo más "chulo" en cuanto a diseño no resulta lo más adecuado para el mercado...

Ahora habrá que esperar a poder probarlo sobre la carretera, que será realmente donde podamos valorarlo en su justa medida, en cuanto a calidad de pisada, sonoridad...

Fuente:  http://es.autoblog.com 

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